La Atención es uno de nuestros recursos más valiosos
La atención es uno de nuestros recursos más valioso ya que, cuando estamos presentes:
Le quitamos fuerza al ego, esa voz interna que nos dice como percibir, basándose en el miedo y en la creencia que debemos protegernos o atacar
Dejamos de alimentar el diálogo interno repetitivo y limitante
Nos abrimos a las infinitas posibilidades del aquí y del ahora
Tomamos decisiones alineadas con nuestro Ser, desde el adulto, desde el presente y no desde el pasado
Reducimos el estrés y la ansiedad que no son más que las ganas de querer controlar
Aumentamos nuestra vitalidad
Nos enseña a observar sin juicios
Recuperamos nuestro poder personal
Por ello, la meditación es una gran aliada a la hora de cultivar la presencia.
Por milenios, las filosofías orientales como el yoga o el buddismo compartieron prácticas para llevar nuestra atención al presente, en el yoga por ejemplo, uno de los objetivos de la práctica mental y fisica, es poder llevar la atención plena a nuestro día a día, el estar presentes en cada tarea que realizamos y el observar nuestros pensamientos. Además, nos enseña a accionar en vez de reaccionar ante aquello que pensamos, sentimos y percibimos.
Reaccionamos cuando estamos imbuidos en los pensamientos del pasado, cuando dejamos de estar en el adulto (el presente), cayendo en el papel de víctima, dejándonos llevar por los patrones de pensamientos y creencias limitantes que continuamente están repitiéndose en la mente como un disco rallado, obstaculizando nuestro avance.
Por otro lado, cuando estamos en el presente, dejamos de reaccionar y empezamos a accionar desde un espacio de total responsabilidad ante aquello que nos acontece, a lo que percibimos, pensamos o sentimos, dejamos de proyectar en el afuera, dejamos de juzgar al otro y nos responsabilizamos por nuestros estados internos y por todo aquello que vivimos.
Al juzgar al otro, al decir que X situación y otra persona tiene la culpa de tu mal humor, de tu enojo, de tu tristeza, etc. lo que estamos decretando es que esa persona o situación tiene poder sobre nosotros, cediendo nuestro poder personal y asumiendo roles de víctima, actuando como niños con actitudes infantiles.
La buena noticia es que hay herramientas para ayudarnos a salir de estos estados des-balanceados e incongruentes y la meditación, que es básicamente la practica de la atención plena, es una de ellas.
No cabe duda que la meditación es un reto para todos, sobretodo en la cultura en la cual vivimos donde continuamente estamos siendo bombardeados por información de todo tipo, a través de la televisión, los medios sociales, los continuos mensajes, llamadas y correos que desvían continuamente nuestra atención del momento presente.
Con los avances en la tecnologia podemos presenciar cómo la cultura y la forma de vivir se ha ido acelerando cada vez más, siempre con prisas y cada vez menos tiempo para atender nuestros interior.
Nos hemos acostumbrado a levantarnos e inmediatamente coger nuestro telefono o encender la tele para consumir información, no dandole espacio a nuestro Ser de crear conexión con nosotros y guiarnos en nuestro día.
Por ello ahora más que nunca debemos tomar conciencia de que, si queremos recuperar nuestro poder personal, nuestra energía vital y nuestro libre albedrío debemos ponernos manos a la obra, comprometernos con nosotros mismos creando nuevos hábitos que nos ayuden a recuperar aquello que supone una ganancia enorme para nuestro bienestar.
Como todo hábito, para obtener resultados debemos ser constantes, la meditación es un hábito que se debe cultivar diariamente, y a medida que nos comprometemos con la práctica vamos recibiendo paulatinamente los enormes beneficios que conlleva hacerlo, podemos empezar unos minutos diariamente e ir aumentándolos a medida que vayamos avanzando, en esos momentos nos enfocamos en atender a nuestro interior, atendemos a la incomodidad, a las sensaciones corporales, a las emociones presentes y a los pensamientos recurrentes.
Resulta importante resaltar que la práctica conlleva un observar continuo fuera de todo juicio, es ser compasivos con nosotros mismos en los momentos en que la práctica se presente desafiante, es practicar el amor propio continuo y soltar el control, es abrirnos a recibir ayuda de nuestro Guía Interior el cual está siempre esperando a que le demos el permiso de intervenir y darnos una mano, es ir confiando cada vez más en lo intangible, en ese 99% que nos vemos con los ojos del cuerpo pero que está siempre presente y que hace parte de nosotros.
Te invito a darte el permiso de tomarte unos minutos de escucha interna, de atención plena, de concederte ese espacio para ti que eres lo más importante.
Que tenga un lindo día hermoso Ser.