Ten confianza en ti mismo y en tu contribución al mundo
Cuando decidimos embarcarnos en crear nuestro propio negocio como entrepeneurs y dejar atrás aquello que estuvimos ejerciendo por años, es interesante explorar dentro de nosotros mismos y por nosotros mismos, el valor de nuestra transición profesional. Esto nos ayuda a evitar la búsqueda de validación externa y encontrar dentro de nosotros la fuerza y el coraje de compartir nuestras habilidades desde nuestra autenticidad y nuestro centro.
Decidir responder a tu llamado interior es un acto de fe, es un llamado del corazón que pocos responden por miedo a fracasar, o el “que dirán” que viene a ser nuestra propia voz del juicio proyectada en el mundo exterior, porque la zona cómoda (que ni tan cómoda es) nos brinda seguridad a pesar de presentar insatisfacción que terminamos tapando con deseos y acciones pasajeros. Otras veces no damos el paso porque no sabemos cómo, ya que no queremos que nuestra vida se vuelva un caos, por ello debemos aplicar un amoroso discernimiento y usar nuestra mente estratega para no lanzarnos de cabeza sin pensar y de ser necesario asesorarnos con personas que ya hayan pasado por ese camino y sean exitosos.
“Haz de tu vocación tus vacaciones. Ese es el secreto de tu éxito” - Mark Twain
¿Te imaginas poder levantarte todos los días con ganas de crear y trabajar con entusiasmo y felicidad porque sabes que aquello que haces aporta a la humanidad un valor agregado único e invaluable? Qué realicemos nuestro trabajo con una hermosa vocación y energía vital porque nos llena el corazón y al mismo tiempo nos brinda abundancia a todos los niveles?
Considero que para embarcarnos en la aventura de crear nuestro propio negocio hacen falta los siguientes ingredientes:
1- Conócete muy bien, no trates de ser alguien más, no escondas partes de ti, ni trates de encajar en un molde ya que así te arriesgarás de convertirte en alguien que no eres. Conoce tus sombras, tus inseguridades y abordalas, así como también reconoce tus habilidades y fortalezas.
2- Date cuenta que la vocación que nazca del centro de nuestro corazón es el fruto de nuestras experiencias agradables y no tan agradables, nuestras pasiones y las elecciones que hemos tomado hasta el momento presente. Es una co-creación con la vida, no hay un manual de instrucción porque es una aventura que nos estamos dando el permiso de vivir y experimentar, donde a medida que avanzamos el camino se va abriendo y mostrando. Es hacernos amigos de la incertidumbre, donde soltamos el control y confiamos en la ley universal de la suposición, en la ley de la afluencia y en la ley de la atracción. Persistimos, accionamos desde nuestro centro, visualizamos, damos por hecho que el universo proveerá aquello por lo que ponemos nuestro foco y energía.
“Si asumes el éxito y persistes, en esa suposición no puedes fallar. Esa es la ley” - Neville Goddard
“La afluencia es la experiencia en la que nuestras necesidades se satisfacen fácilmente y nuestros deseos se cumplen espontáneamente” - Deepak Choprak
“Pedid y se os dará” - Mateo 7:7
3- Nadie nos dará el permiso de empezar por el camino que deseamos iniciar. Es una autorización que nos damos nosotros mismos, que nos permite tomar los pasos necesarios, paso a paso. Nuestro éxito dependerá de que tanto creemos en nosotros mismos, de nuestra persistencia, que se convertirá en una profecía auto-cumplida, será siempre el resultado de nuestro dialogo interno, de aquello que nos repetimos, de nuestras elecciones y acciones diarias. Dia tras dia, estamos a cargo de la energía que le ponemos a desarrollar nuestra práctica diaria.
4- Date el permiso de crear algo totalmente nuevo, que esté fuera de los parámetros establecidos por la sociedad significa que está lleno de potencialidad por su novedad. Muchos no lo entenderán al inicio pero que eso no te detenga.
Te invito a darte el permiso de reinventarte, de co-crear con intención, de escuchar el llamado de tu corazón y de tu alma que te pide que vivas tu vida desde tu autenticidad, tu verdadero Ser.
Que tengan un hermoso día